Director, Sean Ellis
Esta película tiene un estilo clásico, como las películas de Hitchcock. Al igual que ellas tiene algo que no convence y es sencillamente que no se explica porqué sucede lo que sucede. Muy al igual que 'los Pájaros' película donde a los pájaros les da por atacar a la gente así porque sí (lo cual es puramente absurdo) en la presente cinta, unas criaturas que salen de los espejos intentan reemplazar a todo aquel que se mira a sí mismo en el espejo. El problema de la película es la confusión entre el Yo de la víctima y el del que la suplanta. Ellis supongo que inteligentemente añade la parte de amnesia traumática para confundir y crear un suspense interesante pero falla al confundir como he dicho, el Yo con la apariencia de la persona. Para Ellis, la mente no es más que un subproducto de las facciones que uno tenga, el aspecto que uno tenga. La personalidad, la memoria y todo lo demás viene dado automáticamente con la apariencia y ni se desarrolla, ni se construye, sino que es como parte del 'inborn package of the individual' . Una pena de película si señor, porque está bien construida y su lentitud y atención a las expresiones que acentúan la angustia, son muy apropiadas para crear tensión e interés. No se hace gran uso de efectos especiales y es por ello refrescante.
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